Presuntos responsables serían los remanentes narcoterroristas en esta parte del país
El periodista ayacuchano Emerson Quispe Pacheco informó para LVSNoticias que los cuerpos de los siete policías abatidos presuntamente por los remanentes narcoterroristas en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), serán trasladados a la ciudad de Lima en las próximas horas, luego de pasar la necropsia de ley y los distintos exámenes para determinar el número de balas que provocaron sus decesos.
El hecho sucedió el pasado sábado al promediar las 9:45 de la mañana, cuando un convoy de agentes especializados de la DINOES se dirigía a la comunidad de Puerto Cocos, ubicado en el distrito de Pichari en la región Ayacucho. Fue a la altura del anexo de Mirimiri, perteneciente a la comunidad de Natividad, cuando fueron emboscados y abatidos.

De acuerdo a la versión manejada por la prensa local, los agentes policiales no contaban con las armas de reglamento, a pesar de ser una zona en emergencia controlada por el comando especial VRAEM que es integrado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú, lo cual los habría dejado desprotegidos ante el ataque de los elementos subversivos.
Los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados en ambulancias de la sanidad de la policía de la ciudad de Huamanga, lugar en donde les realizaron los exámenes de ley respectivos los cuales culminaron la madrugada de este lunes.
Se tiene previsto que en los funerales estén presentes el ministro del Interior y la presidenta Dina Boluarte.